Ames o detestes la idea de los propósitos de Año Nuevo, ‘Veganuary’ te ofrece una forma menos comprometida de cambiar tu estilo de vida. El compromiso de empezar el año con 31 días sin consumir productos animales atrae a más participantes año tras año. En 2022, alrede-dor de 629,000 personas de 220 países adoptaron una alimentación vegana en enero, un au-mento de 129,000 respecto al año anterior, y los operadores de servicios de alimentación in-novadores lanzaron más de 1,540 nuevos productos y menús veganos. Este año, Veganuary va a batir nuevos récords.
Veganuary: empieza el año con una nueva visión
Con la misión de acabar con la cría de animales, proteger el planeta y mejorar la salud de las personas, Veganuary aprovecha las oportunidades que se presentan con el cambio de año. «La gente está más sensibilizada con la comida sana y ligera, sobre todo después de las intensas fiestas navideñas», afirma Stephan Leuschner, Director de Ghost Kitchens, Culinary Concepts & Broadcast de RATIONAL AG. «Todo año nuevo empieza con una buena intención».
Mediante la colaboración con embajadoras como la actriz Joanna Lumley, la empresaria Deborah Meaden y la antropóloga y activista medioambiental Jane Goodall, así como la incorporación de empresas como Harrod’s, Volkswagen y Quorn para que participen en su reto en sus trabajos, Veganuary lleva nueve años haciendo que el veganismo sea más visible y accesible.
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Ventajas de practicar la alimentación vegetal
Ser vegano durante un mes les da a los consumidores la oportunidad de probar sus beneficios. Una encuesta de YouGov reveló que el bienestar de los animales es la principal razón para dejar de comer carne, mientras que el 54% de la gente se cambia a la alimentación vegetal por motivos medioambientales y el 46% por motivos de salud personal.
En un momento en que la crisis climática se ha vuelto crítica, un estudio de Veganuary calcula que un mes de abstinencia de carne por parte de una persona podría evitar 100 kg de emisiones de CO2 a la atmósfera. Si se mantienen veganos a largo plazo, sus emisiones podrían reducirse en aprox. 1.2 toneladas al año. Según un estudio de 2018 de la Universidad de Oxford, una dieta vegana es la forma más eficaz de reducir nuestro impacto medioambiental.
Según los expertos en salud de NiceRx, una dieta basada en plantas también puede reducir la ingesta de grasas saturadas y colesterol en un 15-30%, ayudando a reducir el riesgo de enfermedades cardiacas. Una dieta vegana rica en hidratos de carbono y fibra, centrada en componentes como la fruta, la verdura, las legumbres y los alimentos ricos en almidón, también podría contribuir a aumentar la energía y a reducir la probabilidad de padecer enfermedades como la diabetes, el cáncer y la obesidad. Un estudio de The Vegan Society muestra que el 56% de las personas que se volvieron veganas reportaron una mejor digestión, el 55% experimentaron un mejor sueño y el 53% tenían más energía.
Los beneficios de ser vegano siguen inspirando a la mayoría de los participantes en Veganuary más allá de enero, con un 85% de participantes que reducen al menos a la mitad su consumo de productos animales a largo plazo, según las estadísticas de Veganuary. De los que siguieron siendo veganos, el 48% se inspiró en las deliciosas opciones de comida vegana.
«Con el aumento de la oferta de comida vegana, es más tentador encontrar nuestros platos favoritos y comida deliciosa», explica Leuschner. «Ahora que (el veganismo se vuelve) más popular, tenemos mejores opciones». Cada vez son más los operadores que se esfuerzan por ofrecer menús aptos para veganos, con opciones veganas especiales en restaurantes tan conocidos como McDonald’s, KFC, Nando’s, Domino’s, Wagamama, Wetherspoon’s, Costa, Starbucks, Krispy Kreme y Gregg’s. Este año, Zizzi ofrece un Calzone de «albóndigas» sin carne, y Subway se ha asociado con The Vegetarian Butcher para ofrecer bistec Teriyaki a base de plantas. Para algunos, estos cambios han llegado para quedarse, y Burger King pretende que la mitad de su menú no contenga carne para 2030.
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La corriente vegana
Las innovaciones veganas no sólo ofrecen más opciones a los consumidores ambiciosos, sino que los menús a base de plantas también permiten a los operadores aprovechar la floreciente oportunidad del mercado sin carne. «Los operadores pueden adquirir experiencia valiosa creando y produciendo comida vegana sabrosa a mayor escala», dice Leuschner. «No es una excepción, puede convertirse en el camino principal».
La Universidad de Surrey descubrió que las ventas semanales promedio de alimentos de origen vegetal crecieron un 57% durante el Veganuary 2021, pero esta tendencia no se limita a sólo un mes del año. Se prevé que el sector de los alimentos de origen vegetal crezca hasta superar los 162,000 millones de USD en 2030, frente a los 29,400 millones de USD en 2020, y que las ventas de alimentos de origen vegetal crezcan tres veces más rápido que las ventas de alimentos en general, según el Good Food Institute. Los operadores deberían tomar nota, y eventos como el Veganuary ofrecen la oportunidad de probar la incorporación de productos veganos a sus menús.
Alex Rushmer, Chef-Patrón del Restaurante Vanderlyle de Cambridge, demuestra que los operadores pueden experimentar con platos sin carne que no comprometen el sabor ni el lujo, desde el parfait de nuez de la India al caviar de algas de origen vegetal. «La cocina basada en plantas […] es increíblemente interesante, supone un gran reto, pero también es muchísimo más barata», explica. Con los recursos bajo presión en todo el mundo y muchas empresas y hogares luchando por mantenerse al día con la inflación, la alimentación basada en plantas puede ser no sólo una opción más sana y ética, sino también más viable económicamente.
Aunque puede que la cocina vegana o basada en plantas haya pertenecido alguna vez a una minoría, y que la idea del Veganuary se haya considerado una moda pasajera, cada vez es más evidente que las opciones alimentarias basadas en plantas, sin carne o flexitarianas han llegado para quedarse, ofreciendo tanto a los consumidores como a los operadores la oportunidad de replantearse las implicaciones de sus ingredientes.